La vacuna fue probada con cerca de 40 mil voluntarios en todo el mundo, 20 mil de los cuales recibieron a vacuna y los 20 mil restantes recibieron el placebo (solución salina, una sustancia inerte que no genera inmunidad).
En septiembre de 2021, el Pecet, abrió convocatoria en la ciudad para encontrar los voluntarios que recibirían la dosis. Más de 3 mil personas mayores de edad y que no hubieran contraído el Covid-19, se inscribieron. De estas, fueron seleccionadas 112 personas para participar en el estudio.
Actualmente, con el avance de la vacunación de los adultos mayores de 60 años en el país, el ciego del estudio se ha ido descubriendo y a los voluntarios que tenían el placebo, se les ha preguntado si desean la vacuna de Janssen o si desean aplicarse la que la EPS les va a suministrar, de esta manera, el estudio continuará recogiendo evidencia científica sobre la seguridad y la eficacia de la misma por el año y medio que resta del estudio.
“La vacuna de J&J/Janssen tuvo un 66,3 % de efectividad en los ensayos clínicos (eficacia) para prevenir la enfermedad del COVID-19 confirmada en laboratorio en personas sin evidencia de infección anterior 2 semanas después de recibir la vacuna. Las personas alcanzaron la máxima protección posible 2 semanas después de vacunarse.
La vacuna tuvo un alto nivel de eficacia para prevenir la hospitalización y muerte de personas que contrajeron la enfermedad. Ninguna de las personas que contrajeron COVID-19 al menos 4 semanas después de recibir la vacuna de J&J/Janssen tuvo que ser hospitalizada.
La evidencia inicial sugiere que la vacuna de J&J/Janssen podría brindar protección contra la infección asintomática, la cual ocurre cuando una persona es infectada por el virus que causa el COVID-19 pero no se enferma”.
Tomado de: https://espanol.cdc.gov/